La final del France Grand Master iba a citar, un domingo más, a las dos mejores parejas del ranking y por ende también las dos mejores duplas del año. Un cara a cara con algo más en juego que un título.
Porque la escalada de De Pascual y Alfonso apunta alto. Concretamente, al uno. Llegaron tarde al año, no tuvieron opción durante la soberbia racha de los líderes, pero el tramo final de año abre la puerta a una disputa real por el trono de A1.
Una realidad que dejaría clara la última contienda en ell último torneo regular de A1 donde la pareja dos saltaría a pista a proponer, a ser fieles a así mismos. Sin rubor y con la estrategia del juego clara, Juani y Gonza lograrían no perder la dinámica del partido ante el habitual acelerón de Maxi y Franco.
En un set de máxima paridad y a pesar de no estar finos en los puntos de oro, De Pascual y Alfonso darían el primer golpe al partido en el undécimo juego, el que más duele, para ponerse por delante en el marcador.
Un paso al frente que tendría respuesta del otro lado de la red. Los uno, que se han visto en infinidad de ocasiones así no acusarían el golpe y seguirían trabajando para reducir los errores, quizá su gran lastre.
Una mejoría que acusarían sus rivales en la segunda manga tras mantener la igualdad los primeros juegos y que se haría evidente a partir del quinto capítulo donde Arce y Dal Bianco abrirían una brecha significativa en el marcador.
La ventaja, suficiente, permitiría a los argentinos igualar el partido y forzar el desempate del tercer set donde parecían favoritos por la dinámica de los últimos compases.
Entonces De Pascual haría emerger su figura. El de Pergamino acoplaría su estilo de juego a las necesidades del equipo para quedarse rezagado en el fondo de pista e intentar manejar el partido desde ahí con el globo y el revés. Y funcionaría.
La lectura acertada del zurdo abría espacio al contragolpe a Alfonso, desordenaba a Arce y Dal Bianco y permitía generar la duda en el centro. Y volverían los errores a los líderes del ranking. T la tensión por un amago innecesario de Alfonso.
Un break en el octavo juego sería definitivo para que la dupla dos asaltara la final conqusitando su cuarto título del año por 7-5, 3-6 y 6-3. El más importante de sus carreras al ser el de Francia de categoría Grand Master.